viernes, 16 de julio de 2010

Una Pareja Feliz

Los ví. Los seguí. Y saqué la foto des de mi auto. Soy todo un Julio César.


Había que ir a la conquista de la Galia metafórica a la que esta pareja, obviamente jubilada, se dirigía en una mañana de trabajo. Resulta que no iban a ninguna parte, sino a estirar las piernas un poco por su barrio residencial silvestre en Washington.

Hubiera dicho Tolstoi: todas las parejas felices se parecen entre sí; las infelices son desgraciadas cada una en su propia manera.

Es una escena de Primer Mundo.

¿Hay jubilados sin ansiedades en el Segundo, Tercero o Cuarto? ¿En esos sub-mundos, hay acaso más que unos escasos barrios de este tipo, reservados para los bastante adinerados?